lunes, 7 de octubre de 2013

Quiroactiva, Challenge y otras cosas

Bueno, como algunos ya habéis podido ver y leer, aún hay gente por ahí que confía en mataillos como yo. Pere es un gran tío, y creo que podemos formar un gran equipo. Ambos tenemos la esperanza de que en esta nueva temporada, mi evolución siga en esta línea positiva, con trabajo duro y con recuperaciones acordes a esos exigentes entrenos. Así que estoy muy contento y para mí es un orgullo anunciar que Pere y yo hemos llegado a un acuerdo para la temporada que viene.

http://quiroactiva.blogspot.com.es/2013/10/eloy-serrano-quiroactiva.html


A parte de esto, Bicimarket Badalona seguirá dejando a punto mi bici y facilitándome las cosas como siempre, así que también gracias a David.


El sábado corrí la marcha cicloturista de la cadena ser, la Dalepedales. 113 km con 1600 +. La cosa no pudo salir peor, y lo único que respondió bien fueron mis piernas. A los 15 km, después de hacer un Valentino Rossi (derrapar durante 15 metros con la bici de lado, y no caerme), el resultado es la llanta trasera doblada, tocándome en la pastilla de freno el resto de la carrera. Llego arriba del primer puerto, Òrrius, en el grupo de cabeza con Pato, éramos unos 12-15. Bajada con cuidado y en la última recta, pillo tierra, piedras, etc, llego abajo y al girar a la derecha, al suelo. No entiendo nada, así que miro y claro, rueda delantera pinchada. No me hago nada, sólo unos rasguños, así que me levanto rápido pensando que no tengo ni cámara, ni aire, ni nada. Es el kilómetro 35, quiero irme para casa. Aparece Juan Antonio y aunque le insisto en que siga, se para, me deja una cámara, me da su bomba y cambiamos la rueda. Le agradezco enormemente el compañerismo que muestra siempre en carrera o fuera de ella, Juan eres un tío muy grande, gracias. También llegan Noel, Juanjo, Javi, Sergi y se paran, gracias también a ellos por interesarse. A partir de este momento fueron 80 km pensando en lo que me va a costar reparar esa llanta doblada. Destaco sobretodo la ascensión de Parpers con Juan Antonio, relevándonos y subiendo muy muy rápido.
No me gusta criticar cuando alguien apuesta por el deporte, pero la organización, fue penosa. Fuimos solos, sin ningún control, sin ninguna protección, parando en los semáforos, parando en las rotondas. Fue un día de entrenamiento pero pagando. Lo único bueno los avituallamientos, y compartir la mañana con los compañeros de Sistrells.


La nota positiva del fin de semana fue ayer domingo. El año pasado estuve en el Challenge Barcelona-Maresme como voluntario, y la experiencia fue sencillamente espectacular. Este año Sergio lo tenía como el gran objetivo y yo no me lo quería perder. He compartido varios entrenos con él en los dos últimos meses, y como siempre le he dicho, sabía que estaba preparado para liarla. Este tío es un ejemplo de entrega, sacrificio y constancia. Nunca pone excusas y siempre se toma los problemas como algo que superar. Un ejemplo de persona y de deportista.
Así que allí nos plantamos Eli y yo a pasar un duro día lleno de emociones. Después de pasar bastante frío antes de comer por la lluvia, llenamos la barriga y nos juntamos con Meri, Manolo y Soraya. 
Sergio había empezado la segunda vuelta de las cuatro que tenía la maratón. Llegó toda su família y cada vez que pasaba seguro que sentía ese empujón de todos nosotros gritando. Tal y cómo habíamos comentado los días anteriores, al poco de empezar la última vuelta me puse a correr a su lado para hacerle algo menos duro el sufrimiento. Me pregunta si está en el tiempo deseado, bajar de esas 10h. Le digo que sí, que claro que sí, que siga a ese ritmo (iba por debajo de 4'30 en ese momento seguro!) y que el sub10h es suyo, que sólo tiene que aguantar ese ritmo. Lo acompaño un poco más y lo dejo dándole toda mi energía positiva, y vuelvo corriendo, me junto con Eli y vamos hacia la meta, que nos quedaba un trozo. Tras unos diez minutos de espera, cuando aún le sobraban otros tantos minutos para su objetivo, allí aparece a lo lejos. Le grito todo lo fuerte que puedo, me choca la mano y va hacia la meta. La cruza en 9h52'36". Lo ha conseguido. Todos nos emocionamos porque sabemos que lo merece más que nadie.
Sergio González Santos, estas líneas son mi pequeño homenaje por todo lo que nos hiciste sentir ayer. Felicidades y es un honor haber podido aportar mi granito de arena. Eres un grande.


Y respecto a mi temporada, pues bueno, está acabada oficialmente. Estoy muy muy contento de este final de temporada y espero que el año que viene aún sea mejor. Ahora toca descansar unos días física y mentalmente.


Gracias a todos por los ánimos de siempre, 

Abrazos!!

Vistas de página en total